"Como ya están enterados nuestros lectores, el próximo día 14, festividad de San Fidel de Sinmaringa, ha sido designado, por ser la onomástica del Rvdmo. Prelado, para celebrar en nuestra Diócesis el "Día del Obispo".

Con esta ocasión todos los ciudadanos debemos dirigir nuestra mirada hacia el pastor concreto que el Señor nos ha deparado, Excmo. y Reverendísimo, Dr. D. Fidel García Martínez, para rendirle nuestro homenaje sincero y mostrarle el testimonio de nuestra adhesión inquebrantable.

Podemos sentirnos orgullosos de nuestro gran Obispo, santo y sabio, que durante 27 años rige con acierto indiscutible y celo ejemplar la Diócesis de Calahorra y La Calzada y que es conocido universalmente por sus virtudes episcopales que le han dado una personalidad inconfundible.

El es, ante todo, el "homo Dei" el "Obispo virtuoso" consagrado plenamente a la obra de Dios en sí y en los demás, apareciendo siempre y en todas partes como el Buen Pastor que va delante de las ovejas con su ejemplo. Dueño de una voluntad gigante, dirigida por una inteligencia prócer, ha llegado a adquirir esa ecuanimidad, ese equilibrio imperturbable, que no se deja abatir jamás y que parece constituye la silueta moral de nuestro amadísimo Prelado.

Es el sabio pensador que domina con difícil facilidad todas las ciencias eclesiásticas y el gran Maestro que sabe repartir por todos los medios a su alcance el pasto abundoso de la divina palabra.

Hablen sus luminosas pastorales, alguna de las cuales ha llegado a adquirir alcance internacional

Hablen sus magníficas oraciones sagradas, modelo acabado de oratoria sagrada, tanto por la altura y elevación del pensamiento, como por la sencilla y transparente belleza de su dicción.

Hablen sus ejemplares catequesis, en las que aparece como el Divino Maestro, rodeado de niños, que le escuchan embelesados.

El es el Pastor vigilante que ha puesto el caudal de su personaliad extraordinaria al servicio de la Iglesia en el gobierno de su Diócesis, destacando entre todas sus obras, como acierto indiscutible la obra del Seminario y la Obra de Vocaciones Sacerdotales que ha encontrado su ambiente y ha calado tan hondo en el corazón de sus diocesanos, que ha llegado ya la hora, en la que el dignísimo Rector de nuestro Seminario Diocesano ha podido decirle como deseaba: "Señor, Vos habéis hecho un Seminario para doscientos alumnos y vuestra Obra de Vocaciones ha colocado en cada celda su gracia. Por ello ensanchad vuestro Seminario, para que tenga campo adecuado la generosidad de los fieles.

Al celebrar el día de nuestro amadísimo Prelado ningún homenaje mejor, que el mirarnos en la vida y copiar en nostros sus virtudes; meditar sus afanes y deseos y ayudarle a hacerlos realidad mientras elevamos al cielo nuestra plegaria, para que el Señor le conserve y le dé larga vida para bien de la Diócesis y de la Iglesia de Cristo".