Carmen fue todo un mito en el nuevo "Frontón Madrid" de la calle del Dr. Cortezo de la capital en los "Felices Años Veinte".
El éxito económico y lúdico de la propuesta de las raquetistas, pese a las reticencias de los puritas y la constante acusación de "tongo" en las quinielas y en las apuestas, hizo que la especialidad se extendiera y se dignificara con un espacio o local muchísimo más confortable. Es el nuevo Frontón Madrid. En él jugaron las "señoritas pelotaris" que alcanzarán fama después en todas las canchas del país y en hispano américa.