1952: La Rioja
contra Aragón, Valencia, Cataluña y GAVN
XI campeonato
La Rioja juega cuatro eliminatorias en este campeonato.
La primera contra Aragón. En Zaragoza la pareja formada por
José María San Martín (Barberito III) de Baños y
Jesús Zabala de Oyón ganan a Crucetas y Oroz por 22 a 6. En el Beti-Jai logroñés
José Luis Huergo Soto de Navarrete, como manomanista, hace lo mismo por 22-5.
En Valencia Huergo gana también por 18 a 6 y pasa a las semifinales. La pareja riojana Barberito III y Zabala se enfrenta a la de Cataluña a doble partido: en el Beti-Jai ganan por 22 a 7 y repiten triunfo en el Chiqui barcelonés por 22-9. También pasan a las semifinales.
Al manomanista Huergo le toca la peor parte al tenerse que enfrentar con "el huracán de Bernedo", Ogueta, y es eliminado con 18 a 2 en el Beti-Jai. Sucede exactamente igual, aunque con un resultado más decoroso, 22 a 16, con la pareja, que es derrotada por la de Guipúzcoa.
1953: La Rioja en el GRAVN
XII campeonato
La selección riojana se integra para jugar este campeonato en el GRAVN (es decir, las cuatro provincias vascas: (G)uipúzcoa, (Á)lava, (V)izcaya y (N)avarra, más la R de (R)ioja). Es un paso adelante, pues así los representantes riojanos juegan a un nivel de mayor calidad y en un número más amplio de partidos. El calendario iba desde el 15 de febrero hasta el 19 de abril, en una liguilla, y en la que jugaban todos contra todos a doble partido, clasificándose en cada especialidad los que acumularan más triunfos, que pasaban a la final, y los segundos jugaban las semifinales con los campeones de las demás Federaciones del país.
En la primera ronda (15 febrero), La Rioja juega fuera: en el frontón del Club Deportivo de Bilbao. En individual, Pedro Martínez,
Pedrín de Baños, pierde por 18 a 8.
La pareja formada con
Alfredo Ocón de Murillo y otro Barberito, el II,
Miguel San Martín, sin embargo
gana por 22 a 19. Navarra se retira del campeonato por discrepanacias.
El 1 de marzo, el domingo anterior había descansado, La Rioja juega en casa: en el Beti, contra Álava. En individual se pierde por 16 a 18, siendo ahora el seleccionado "
Cuco", o sea, Félix Zapata de Albelda. La misma
pareja, sin embargo,
vuelve a ganar por 22 a 16.
Como se ha retirado Navarra, el 8 de marzo no se juega. El día 15 se hace en el Gros de San Sebastián.
Miguel Picote de Albelda es el nuevo manomanista, que pierde por 18 a 15.
La pareja sigue consechando triunfos, ya es el tercero, y
ganan con un 22 a 17.
Otra vez en casa, en el Beti-Jai, el día 22 de marzo contra Vizcaya.
La pareja vuelve a ganar por 22 a 15 y
también Picote, por 22 a 10.
En Vitoria, el 5 de abril, pierde la pareja por primera vez y por la mínima, 22-21; Picote también contra Ochoa por 18-7.
Finalmente en el Beti-Jai se juega contra Guipúzcoa.
Picote deja en uno a su contrincante.
La pareja, en esta ocasión no juega Barberito II, que es sustituido por "Cuco",
gana igualmente por 22 a 14.
La pareja riojana (
Ocón y Barberito II) juega la final el 17 de mayo en San Sebastián pero pierde contra los vizcaínos Bengoechea y Ormaechea, por 22 a 4. Fue una ocasión perdida, pero se estuvo a un paso del triunfo.
La alianza de los tres valles
E l valle del Leza y el del Najerilla forman la base de las selecciones riojanas de los primeros años cincuenta para actuar en pareja en los Campeonatos Nacionales de Pelota Vasca. La gran escuela de pelotaris de Murillo retoma el protagonismo de décadas anteriores, mientras que la de Baños de Río Tobía insiste con la familia San Martín, ahora con los hijos siguientes de la saga, José María y Miguel, Barberito III y II, respectivamente. Cuando éstos se profesionalizan les suceden los de Hervías.
Cuesta mucho más encontrar un manomanista fiable. Pero los efectos de la "vuelta al campo" derivados de la política del franquismo, sin embargo, dinamizan a otras poblaciones con menor cultura pelotazale, y van llegando nuevos pelotaris del valle del Iregua (Albelda -Miguel Picote-, Alberite -Sotelo-, Villamediana -Esteban Gil-), así como también de poblaciones situadas en las altiplanicies próximas como Entrena (Amador Torrecilla "Zapatero" y Pedro Narro) y Navarrete (Huergo, continúa Olagaray), e incluso de poblaciones de otras provincias como Oyón (Jesús Zabala).
Así que estos primeros años cincuenta fueron la época de las pruebas hasta llegar a encontar a un manomanista seguro que representara a la región. Se inicia con la tradicción: buscando en Baños, con Pedrín; y en Albelda, con "Cuco"; pero al final se ensayan diferentes opciones, hasta que al fin se encontró la solución: Moisés Moreno del Val, de Hervías. Los tres valles -tal vez el segundo apellido del campeón fue una premonición- terminaron por coaligarse.